Ayer finalizó un nuevo taller en la Casa de Encuentros de las Mujeres del Ayuntamiento de Avilés, un taller titulado «Cómo desarrollar la resiliencia y prevenir la depresión».
La resiliencia es un proceso dinámico que tiene por resultado la adaptación positiva en contextos de gran adversidad. Consiste también en saber aprender de la derrota y transformarla en oportunidad de desarrollo personal. No es algo que una persona tenga o no tenga, sino que implica una serie de conductas y formas de pensar que cualquier persona puede aprender y desarrollar.
El estilo de pensamiento de las personas resilientes se caracteriza por ser realista y flexible. Cometen menos errores de pensamiento (como la exageración, la focalización en lo negativo o sacar conclusiones precipitadamente, sin evidencias que las corroboren) e interpretan la realidad de un modo más exacto que las personas menos resilientes. Todo ello contribuye a una visión más positiva de sí mismas y de sus circunstancias, con lo que están menos expuestas a la depresión.
A lo largo de seis sesiones se trabajaron estos aspectos de una forma práctica y muy participativa y la respuesta de las mujeres del grupo ha sido magnífica, aprendiendo de cada una de ellas formidables lecciones de vida.
Mi cariño y admiración desde aquí para todas ellas
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