El miedo es una emoción básica del ser humano, una emoción natural, universal, necesaria y adaptativa, que cumple un papel fundamental: la supervivencia.
El problema surge cuando nuestras creencias e interpretaciones hacen que sintamos miedo de forma irracional ante situaciones que no son realmente peligrosas para la integridad, pero que las interpretamos como tales.
Ese miedo irracional nos lleva, con frecuencia, a evitar o escapar de determinadas situaciones, actividades, lugares, objetos, pensamientos o personas, en definitiva, hace que perdamos terreno y que limitemos nuestra vida. Cuando no existe peligro real, evitar o escapar sólo supone un alivio a muy corto plazo, pues a medio y a largo plazo, contribuye a que el miedo aumente y se generalice a cada vez más situaciones y ámbitos de nuestra vida.
¿Qué hacer para lograr un adecuado manejo de ese miedo irracional?
Hay dos opciones:
1) Dejar de tener miedo
2) Abordar el miedo desde otro enfoque
La primera opción resulta del todo imposible. Si tenemos miedo es porque estamos vivos/as y sentimos
Es más adaptativa la segunda, aprender a agobiarse menos por la presencia del miedo y a no impacientarnos si no desaparece con la rapidez que nos gustaría. Para ello es necesario convencernos de que son sensaciones muy molestas, pero no peligrosas. Adquirir esta habilidad de perder miedo al miedo puede llevar algún tiempo, pero es posible. Esta actitud nos da una cierta sensación de control sobre la situación.
Cierto es que no existe una forma sencilla para vencer el miedo. No existen «pastillas de valor» que puedan hacerlo desaparecer. Eso hace que sea difícil luchar contra él. Y, sin embargo, se puede. No es fácil, no es agradable, requiere de esfuerzo, determinación y voluntad, pero se puede, y, siempre, merece la pena.
La mejor manera de lograrlo es la de ENFRENTARSE AL MIEDO: afrontar la situación que nos amedrenta, poco a poco, en pequeñas cantidades, con ayudas, con elementos de apoyo a los que agarrarnos para seguir adelante y aumentar nuestra sensación de control y eficacia emocional.
Un curso intenso, muy intenso, el terminado el pasado jueves en la Casa de Encuentros de Mujeres del Ayuntamiento de Avilés. Enhorabuena al grupo de participantes por las aportaciones personales, por la honesta reflexión interior, por la valentía mostrada al intentar mirar sus miedos a la cara… Gracias por ser como sois, gracias por el excelente trabajo realizado.
Consulta de psicología Marisol Delgado Artime 
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