La práctica del mindfulness es algo que los peques llevan incorporado de serie. Les resulta muy sencillo pararse a observar lo que está ocurriendo en el presente, sin juzgar lo que acontece y sin caer en las continuas «rumiaciones» que llevamos a cabo ya de adultos y que nos generan niveles de estrés y de ansiedad tan elevados como inútiles.
En esta etapa en la que el juego forma parte indispensable de su desarrollo, las diferentes maneras de practicar la atención plena suponen un juego más en el que los niños y las niñas se sienten motivados y en el que muestran la actitud de «principiante» tan necesaria para ese DARSE CUENTA que está en la base de la práctica del mindfulness.
El pasado 21 de enero el Centro Infantil La Escuelina, en Gijón, me invitó a impartir un taller de atención plena para niñ@s. Acepté encantada,tanto porque hacía ya tiempo que no trabajaba con un grupo de gente menuda y lo echaba un poco de menos, como porque me parece muy importante promover esta práctica, tanto en los peques, como en las madres y los padres para que puedan seguir desarrollando los ejercicios llevados a cabo en cualquier momento en el que estén con ell@s.
Y cómo me prestó…
Participaron 9 peques con sus familiares, que también llevaron a cabo los ejercicios propuestos en el ambiente cálido y acogedor de la sala de La Escuelina. Ejercicios que abarcaban tanto la práctica formal del mindfulness, como la práctica informal. Ejercicios en los que no puedo, sino, destacar la atención que las niños y los niños participantes ponían en todas las explicaciones, los espontáneos comentarios con los que recibían cada ejercicio, la actitud de confianza y colaboración que mostraron desde el inicio…
Tengo que transmitiros desde aquí el mayor de los agradecimientos, a La Escuelina por invitarme y a los niños y niñas y a sus familias, por convertir la actividad en algo tan MARAVILLOSO.
Me alegra mucho que hayas tenido esta oportunidad y también me alegro por los peques que tuvieron la suerte de aprender de ti. La verdad, es que trabajar con con ellos da muchas satisfacciones y un aprendizaje muy gratificante.
Me gustaMe gusta
Totalmente cierto, Elma, fue muy satisfactorio y gratificante. Habrá que repetirlo en otro momento. Un grandísimo y cariñoso abrazo.
Me gustaMe gusta