En nuestra acelerada sociedad es muy habitual conectar el piloto automático y realizar todas las actividades de nuestra vida cotidiana sin ser conscientes de ellas, lo que, no sólo nos genera estrés, sino que nos desvincula de nuestra vida y nos impide vivirla con mayor plenitud.
El mindfulness consiste en ser plenamente conscientes de lo que ocurre en el momento presente, en observar nuestra experiencia de forma imparcial, sin juzgar, sin etiquetar los pensamientos y las sensaciones como buenos o malos, como justos e injustos, aceptando y reconociendo las cosas tal y como son. Nos enseña a establecer contacto con nuestra propia vida y aprender a vivir en el aquí y el ahora.
La práctica sostenida de Mindfulness ayuda a mejorar:
- Habilidades de autorregulación que permiten manejar y afrontar el estrés, la ansiedad y las demandas de la vida cotidiana.
- Una mayor toma de conciencia ayudando a ver cómo las emociones y los pensamientos influyen en el manejo del estrés, la salud y la calidad de vida.
- Una actitud de mayor autocuidado y compasión que contribuya a no generar círculos viciosos de culpas y autorreproches que aumenten la ansiedad.
- Un rol activo y responsable en el mejoramiento de la salud y la calidad de vida.
- Aumenta activación cerebral en el área pre frontal izquierda; asociada a una respuesta más adaptativa frente al estrés.
- Reduce los niveles de cortisol asociados a una elevada respuesta simpática.
El taller que acabamos de terminar, organizado por la Concejalía de Igualdad del Ayuntamiento de Avilés, ha tenido, para mí, la peculiaridad de ser el primero realizado de forma no presencial, a través de una aplicación en línea. A pesar de todo, ha funcionado de forma genial y se ha podido llevar a cabo tanto en sus contenidos teóricos, como prácticos.

No puedo dejar de agradecer a la Casa de Encuentros su inestimable ayuda y, cómo no, a las participantes, daros las gracias porque sin vuestra colaboración, vuestro interés y vuestra implicación, esto no sería posible. Montones de cariño
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